¿Qué es un silentblock y cómo saber cuándo cambiarlo?

¿Qué es un silentblock y cuándo cambiarlo? | Suministros Torras

Puede que su nombre te resulte conocido o tal vez nunca hayas oído hablar de qué es un silentblock.

Sin embargo, estas piezas son componentes esenciales, principalmente para el funcionamiento de vehículos, pero también muy populares en el sector de la maquinaria industrial. Su importancia, sin embargo, contrasta con su capacidad para pasar desapercibidos para la mayoría de las personas y es que, pese a su pequeño tamaño, su función es crucial para mantener la estabilidad, el confort y la seguridad en multitud de aplicaciones mecánicas. Estos componentes actúan como aislantes de vibraciones y ruidos algo que, llevado a la práctica, contribuye a proteger tanto las piezas mecánicas como a los usuarios de las máquinas o los vehículos. 

Su mantenimiento es, por tanto, una cuestión clave, no en vano, con el tiempo estos componentes pueden sufrir desgaste debido a las condiciones a las que están sometidos como la fricción, la temperatura y la exposición a productos químicos o elementos externos. De ahí que saber cuándo cambiar un silentblock sea fundamental. Desde Suministros Torras tenemos claro que ignorar los signos de desgaste y las señales de alarma o, lo que es lo mismo, no cambiar el silentblock en el momento adecuado puede ser el origen de averías o fallos graves en la mecánica: desde una pérdida de confort hasta problemas de seguridad más serios. Sigue leyendo y descubre todo lo que debes saber para sustituir un silentblock y dónde radica su importancia. 

¿Qué es un silentblock?

Tanto si has oído hablar de él como si es la primera vez que conoces de su existencia, no está de más tener claro qué es un silentblock o, como se le conoce también en el argot popular, un bloque o amortiguador antivibratorio.

Por lo general, un silentblock es un componente cuya estructura consiste en una pieza de goma o caucho intercalada entre dos casquillos o placas de metal. Su principal atractivo tiene que ver con su capacidad para absorber vibraciones internas de distintos tipos de máquinas -desde motores hasta bombas, pasando por grupos hidráulicos…- así como con su disposición para permitir vibraciones de ciertas partes de estas máquinas, pero evitando que la vibración se transmita al exterior o lo haga de manera controlada.  

Si hablamos del sector del automóvil, por ejemplo, tener que cambiar un silentblock no es algo extraño ya que están presentes en distintas partes de un coche. En el motor se ubican en la zona en la que descansa el bastidor y permiten minimizar el impacto de las vibraciones producidas al acelerar, frenar… Aunque también pueden localizarse en la caja de cambios (que suele estar unida al motor) y como parte de la suspensión y la barra estabilizadora. Ruidos raros, vibraciones y hasta cierta inestabilidad en la conducción pueden ser síntomas inequívocos de que ha llegado la hora de sustituir el silentblock. 

En cualquier caso, la clave de su importancia radica en el hecho de que, al estar hechos de materiales flexibles, permiten cierto grado de movimiento controlado, lo que ayuda a absorber impactos y vibraciones generadas durante el funcionamiento normal, evitando que estas se transmitan directamente a otras partes del sistema. De este modo, más allá de mejorar el confort (en el caso, principalmente, de sus aplicaciones en automoción), protegen los componentes mecánicos de un desgaste prematuro. Siendo así, garantizar su operatividad teniendo claro cuándo cambiar el silentblock es más que recomendable.  

¿Cuándo cambiar el silentblock?

Más tarde o más temprano, tener que sustituir los silentblocks es inevitable y es que, como otros muchos componentes, están sujetos al desgaste propio de las duras condiciones a las que están expuestos, como el calor, el frío, la fricción y los elementos químicos o ambientales. Pero ¿cómo saber cuándo ha llegado el momento de cambiar un silentblock para evitar que los daños se acumulen y afecten otros componentes del sistema? 

Aunque no hay fórmulas universales, lo cierto es que existen ciertos síntomas que ayudan a identificar que ha llegado el momento. Más allá de su desgaste visible (o el de otros componentes que se vean afectados por su mal funcionamiento), algunos de ellos son: 

  • Vibraciones excesivas

Ya hemos comentado que uno de los cometidos principales de estos componentes es la absorción de las vibraciones, básicamente, actúan como un búfer o amortiguador evitando que las mismas se propaguen a otros puntos del sistema. ¿Por qué? Pues porque más allá de generar incomodidad pueden desgastar las piezas mecánicas de manera más rápida. Si las vibraciones aumentan por encima de lo normal es más que probable que haya llegado el momento de cambiar el silentblock. Su desgaste puede estar detrás del mal funcionamiento o, lo que es lo mismo, es posible que no esté absorbiendo las vibraciones como debería.

  • Ruidos extraños 

Los ruidos generados por el movimiento de las piezas metálicas de una máquina o motor pueden ser ensordecedores, pero gracias a la flexibilidad del caucho o la goma, el silentblock reduce la transmisión de los mismos. La aparición de ruidos metálicos o poco habituales puede ser un síntoma que indique que la goma de este componente se ha roto o desgastado, permitiendo el contacto directo entre las partes metálicas y, por tanto, indicando que es hora de sustituir el silentblock. 

  • Comportamientos erráticos

Los sistemas mecánicos pueden sufrir movimientos inesperados, especialmente bajo condiciones de carga o esfuerzo, que el silentblock permite realizar sin que resulten bruscos gracias a la elasticidad que aporta. Un funcionamiento que se vuelve errático -ya sea una respuesta inadecuada de una máquina, problemas de estabilidad en la conducción de un vehículo o similares-, también puede ser una señal de que hay que pensar en cambiar el silentblock.

Importancia de utilizar componentes de calidad

Saber qué es un silentblock es importante, pero, como expertos en ferretería industrial, en Suministros Torras no podemos dejar de poner el acento en el hecho de que la calidad de los mismos es un factor clave para garantizar un buen rendimiento y una vida útil prolongada. Con la experiencia de más de 70 años de historia de desarrollo, los silentblocks de Egaña, por ejemplo, ofrecen altos estándares en términos de durabilidad, resistencia a las condiciones extremas y capacidad de absorción de vibraciones. No en vano, son especialistas en el diseño y fabricación de productos industriales de caucho metal. Y lo mismo ocurre con los silentblocks de AMC, otra marca de reconocido prestigio dentro del sector, especializada en soluciones avanzadas para la reducción de vibraciones y ruidos, con una gama de productos adaptada a múltiples industrias.

En la misma línea, también es importante recordar que sustituir un silentblock a tiempo contribuye a garantizar un funcionamiento correcto, prolongar la vida útil del sistema y, sobre todo, mantener la seguridad. Si se identifican los signos de desgaste a tiempo y se utilizan silentblocks de calidad el riesgo de aparición de problemas mayores será mucho menor.